Los agricultores de la región del Catatumbo en Colombia están buscando oportunidades en el comercio internacional a través de la exportación de un producto ancestral: la yuca. La Federación de Productores del Catatumbo (Fedeprocap) está liderando un proyecto piloto para llevar yuca a los almacenes de cadena en los Estados Unidos, marcando un paso significativo en la comercialización de este tubérculo.
El proyecto se enfoca en la industrialización de la yuca, implementando técnicas como el recubrimiento de parafina para prolongar su vida útil hasta 60 días y facilitar su exportación a territorio estadounidense. Pedro Mauricio Yusti Blanco, gerente de Fedeprocap, está brindando asesoramiento a los agricultores para adoptar modelos de certificación de predios y mejorar sus competencias laborales, lo que les permitirá acceder a programas de tecnificación de cultivos e impulsar procesos industriales para fortalecer la cadena de comercialización.
La yuca, un producto de importancia ancestral para la seguridad alimentaria de los indígenas, se ha convertido en una alternativa clave para mitigar el conflicto social en la región del Catatumbo, donde los cultivos ilícitos habían proliferado previamente. La crisis alimentaria derivada de estas plantaciones llevó a los agricultores a retomar los cultivos tradicionales, y la yuca se destaca como un componente esencial en esta cadena productiva.
La iniciativa también busca generar oportunidades de paz y desarrollo en la región. Los agricultores de la Asociación de Productores de Yuca de El Tarra (Asoproyuta) están trabajando en la restitución de cultivos ilícitos y en la adopción de mecanismos que les permitan conquistar espacios tanto a nivel nacional como internacional. Pedro Mauricio Yusti señala que están en la etapa inicial del proceso, brindando acompañamiento logístico, gestión de maquinaria y líneas de comercialización para la exportación, en colaboración con empresas privadas.
Además de la exportación de yuca, se está explorando la comercialización de productos derivados como arepas, empanadas, croquetas y más. La industrialización también busca aprovechar al máximo la materia prima, utilizando incluso la cáscara para la fabricación de concentrado para especies menores como peces, cerdos y pollos de engorde. Con una inversión significativa, se espera industrializar la producción y obtener certificaciones para cumplir con los estándares internacionales de calidad.
Este proyecto no solo busca promover la agricultura sostenible y el comercio internacional, sino también mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la región. Con la transferencia de tecnología y la capacitación adecuada, se está trabajando para ofrecer productos de calidad que cumplan con las exigencias internacionales y contribuyan al desarrollo económico y social de la comunidad.