El viernes pasado, el Consejo Nacional Electoral (CNE) tomó la decisión de invalidar la candidatura a la Gobernación de Norte de Santander del general retirado Jorge Eduardo Mora, quien había obtenido el aval de Salvación Nacional y el Centro Democrático. La razón detrás de esta decisión fue el vínculo familiar del candidato, ya que su hermano, Sergio Alberto Mora, ocupa el cargo de director departamental de la Rama Judicial en la región.
Esta situación ha generado un giro en el panorama político del departamento, ya que Mora había sido respaldado por diversos sectores políticos. El candidato presentó un recurso de reposición, el cual será evaluado por el CNE, pero se considera poco probable que prospere.
La caída de la candidatura de Mora abre el camino para William Villamizar, quien cuenta con los avales de partidos como Cambio Radical, Conservador, Liberal y La U. Este político ha obtenido un nuevo impulso en su carrera tras la decisión del CNE y podría convertirse en uno de los principales contendientes en la carrera por la Gobernación de Norte de Santander.
Esta situación también pone de manifiesto la histórica división interna en el Centro Democrático en Norte de Santander. A pesar de que el departamento es considerado como un bastión uribista, el partido no logra unificar el apoyo de su militancia en torno a un candidato. La misma disputa se ha reflejado en la elección para la alcaldía de Cúcuta, donde la exsenadora Milla Romero decidió respaldar a un candidato que se lanzó por firmas en lugar de respaldar al candidato oficial del uribismo.
En resumen, la anulación de la candidatura de Jorge Eduardo Mora por sus vínculos familiares en la Rama Judicial ha tenido un impacto significativo en la dinámica política de Norte de Santander, abriendo nuevas posibilidades para otros candidatos y evidenciando las divisiones internas en el Centro Democrático.