Alrededor de 3.090 personas cesantes en Norte de Santander encontraron un «salvavidas» en el subsidio de desempleo ofrecido por las cajas de compensación familiar ComfaOriente y Comfanorte durante el último año. Con el fin de contratos laborales que suelen coincidir con el cierre del año, estos subsidios han actuado como un mecanismo crucial para garantizar la protección social a aquellos que se encuentran entre trabajos.
El subsidio, destinado a mitigar los impactos económicos de la pérdida de empleo, incluye el pago de la cotización al Sistema de Seguridad Social (salud y pensión) sobre un salario mínimo por seis meses, así como una transferencia monetaria decreciente durante un período de hasta cuatro meses. Además, se brindan servicios de gestión y colocación laboral, así como capacitación para facilitar la reinserción laboral.
Según ComfaOriente, en el año pasado, asignaron 1.022 subsidios en Cúcuta (747), Ocaña (157), Pamplona (80), Tibú (4) y otras ciudades (34), con un valor total de $3.816 millones. En 2024, hasta el 17 de enero, ya se entregaron 135 subsidios con un valor de $559 millones.
Por otro lado, Comfanorte otorgó 2.068 subsidios durante 2023, con un monto total de $7.643 millones. Hasta el 17 de enero de 2024, se postularon 139 cesantes en espera de recibir los beneficios.
Los requisitos para acceder a estos subsidios incluyen estar desempleado, estar inscrito en el Servicio Público de Empleo, haber realizado aportes a cualquier caja de compensación familiar durante los últimos tres años, finalizar procesos de formación y presentar la documentación requerida.
Si bien estos subsidios no reemplazan completamente los ingresos perdidos, han brindado un apoyo vital a aquellos afectados por la pérdida de empleo, contribuyendo a su bienestar financiero y facilitando su transición hacia nuevas oportunidades laborales. Los interesados pueden postularse directamente en las oficinas de las cajas o de manera virtual a través de sus sitios web.