Profesores, directivos y orientadores de la Red nortesantandereana por una Escuela sin Violencia participaron en la primera jornada pedagógica del año con el objetivo de fortalecer la convivencia escolar y abordar la implementación del Observatorio de Paz Escolar. La falta de datos concretos sobre problemas en las aulas llevó a la creación de este observatorio, que busca proporcionar información sistematizada y pertinente para mejorar la toma de decisiones en las instituciones educativas.
Miriam Támara, directora de la Red nortesantandereana por una Escuela sin Violencia, destacó la importancia de contar con cifras reales para abordar problemas específicos en cada colegio. El Observatorio de Paz Escolar es una estrategia pedagógica y académica que se enfoca en el monitoreo, estudio y análisis de los fenómenos que afectan la convivencia escolar y la paz en la comunidad educativa.
El instrumento se centra en la observación y registro de las estrategias aplicadas para consolidar una convivencia favorable y avanzar hacia escuelas seguras. La implementación del observatorio busca prevenir situaciones de violencia en las instituciones educativas y abordar problemáticas como el uso de sustancias psicoactivas, ciberacoso, sexting y grooming. La iniciativa se presenta como una herramienta técnica y científica para comprender la situación específica de cada escuela y tomar medidas adecuadas.
En la jornada pedagógica, docentes de áreas rurales y urbanas compartieron experiencias y se destacaron los esfuerzos realizados para disminuir los casos de violencia en las instituciones. José Humberto Pérez, profesional del Área de Calidad de la Secretaría de Educación de Norte de Santander, recordó a los maestros la ruta de atención integral para violencia sexual, brindando orientación sobre cómo abordar estas situaciones.