El Hospital Universitario Erasmo Meoz enfrenta una situación crítica tras recibir un giro de $15,000 millones del Gobierno Nacional, destinado a cubrir deudas pendientes y saldar acreencias del personal. Este anuncio ha desatado rumores y temores entre trabajadores y especialistas, quienes expresan preocupación por la falta de claridad sobre el uso de estos fondos.
A pesar de que el desembolso se realizó el pasado 22 de enero, la noticia no ha sido comunicada oficialmente por las directivas del hospital, generando incertidumbre entre los empleados. La institución arrastra una deuda multimillonaria a proveedores y enfrenta atrasos de hasta cuatro meses en el pago de salarios a trabajadores asociados y honorarios a médicos especialistas.
El gerente del hospital, Tonino Botta, asegura que los recursos se destinarán a saldar deudas con el personal, médicos especialistas, profesionales de apoyo y sociedades médicas especializadas. Sin embargo, la falta de transparencia ha llevado a trabajadores y especialistas a pedir a la Procuraduría que vigile el manejo de estos fondos y evite posibles irregularidades.
La crisis financiera del hospital se ha agravado debido a la atención obligatoria a migrantes, una deuda del Gobierno Nacional que asciende a $83,000 millones. Aunque la ley exige brindar atención sin un techo presupuestal, la falta de pago por parte del Gobierno ha contribuido a la precaria situación del hospital.
La comunidad médica y laboral espera que estos fondos sirvan como un alivio necesario para el Hospital Erasmo Meoz, pero la incertidumbre persiste respecto a la gestión y transparencia en el uso de los recursos en medio de la crisis hospitalaria que enfrenta la institución.