Así lo dio a conocer el secretario de Gobierno y alcalde encargado, Miguel Castellanos, luego de la última mesa de trabajo en la que además se dejó claro que durante el desarrollo de la obra, a cargo de la Unión Temporal UMC, por un costo de $8.669 millones, no se encontraron hallazgos que dieran indicio a sobrecostos y demoras injustificadas.

Los trabajos se reanudaron el martes y su entrega está prevista para el 30 de marzo.

En las mesas de trabajo estratégicas que se llevaron a cabo se abordaron aspectos cruciales como el estado de la contratación, sistemas de riesgo eléctrico y paisajismo. El enfoque integral de estos encuentros buscó contextualizar también la situación actual y allanar el camino para la revitalización de este espacio emblemático.

Castellanos reveló que el mismo plazo de dos meses que se concedió al contratista también se dio para la interventoría.

El plazo del contrato estaba pactado inicialmente a seis meses, y del mismo ya se habían cumplido hasta el 29 de diciembre cuatro meses, fecha en que se suspendió por cuestiones de cambio de administración y de año fiscal. “La idea es terminar la obra a satisfacción para que no quede inconclusa”, dijo Juan Bocanegra, secretario de Planeación del Municipio.

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