Los ‘Aviones de Oro’ Quimbaya son un enigma arqueológico que ha dejado perplejos a expertos y entusiastas durante décadas. Estas misteriosas piezas precolombinas, creadas por el pueblo nativo Quimbaya que habitaba en la región que hoy es Colombia, entre Cali y Medellín, han desconcertado tanto a arqueólogos como a ufólogos debido a su sorprendente semejanza con las aeronaves modernas.
A pesar de su nombre, estos objetos no representan aviones contemporáneos, sino que adoptan la forma estilizada de grandes aves, a menudo con elementos de otras especies, como la boca de un cocodrilo. La arqueología tradicional sugiere que estos colgantes eran símbolos de aves, lagartos, peces e insectos que eran parte del entorno natural de la región.
Estas impresionantes piezas de orfebrería, que ahora reposan en el Museo del Oro de Bogotá, se han encontrado en tumbas indígenas en varios municipios colombianos, como Tolima, Quindío y Valle del Cauca. Aunque se cree que su fabricación data de hace unos 500 años, algunos sepulcros donde se han encontrado estos objetos tienen casi 2.000 años.
Los Quimbaya utilizaban una técnica de fundición excepcional para crear estos ornamentos. Usaban cera de abeja clarificada para modelar las figuras y luego vertían oro líquido en los moldes vacíos. Esto les permitiría obtener objetos únicos de oro con gran detalle y precisión.
Aunque el propósito exacto de los ‘Aviones de Oro’ sigue siendo un misterio, se han propuesto varias teorías. Algunos creen que podrían haber tenido un significado religioso o espiritual, posiblemente utilizados en ceremonias rituales como ofrendas a deidades. Otros sugieren que podrían haber sido símbolos de estatus o poder, ya que el oro tenía un valor cultural y económico significativo en la sociedad Quimbaya.
Estos misteriosos objetos continúan asombrando a la humanidad, ofreciendo una ventana intrigante al pasado y dejando preguntas sin respuesta sobre la visión del mundo y la rica herencia cultural de los antiguos Quimbaya.