En el municipio de Ocaña, específicamente en el barrio Llanadas, se produjo un fuerte incendio que dejó a cuatro personas heridas. Las víctimas son habitantes de calle, y fueron trasladadas al Hospital Emiro Quintero Cañizares.
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Los heridos han sido identificados como Yerfrey Andrey Rangel Vega (19 años) y Elkin Alberto Álvarez (37 años), ambos de nacionalidad colombiana, así como José Gregorio Salazar Narváez (17 años), de nacionalidad venezolana. Según el coronel Carlos Esteban, comandante operativo de la Policía en Norte de Santander, el incidente se originó cuando estas personas prendieron una fogata en la vía principal del barrio.
El incendio tomó un giro peligroso cuando las llamas entraron en contacto con las aguas que se vertían en las cañerías, lo que provocó una explosión. Según el oficial, la acumulación de gases fue el factor determinante en este desafortunado evento.
El comandante Esteban enfatizó la importancia de no verter combustible ni aceites en las cañerías, ya que esto no es un tratamiento adecuado para los residuos. También destacó que abordar el problema de los habitantes de calle en la región debe ser una tarea coordinada y articulada entre las fuerzas de seguridad y las autoridades de salud pública. Esto permitiría proyectos para la reubicación de estas personas y reduciría los riesgos de incidentes como el ocurrido.
La problemática de los habitantes de calle no es un caso aislado en Ocaña, y a menudo se asocia con la inseguridad en la comunidad. Los habitantes de calle, que lamentablemente no tienen ningún control, suelen consumir drogas en plena vía pública, lo que genera problemas tanto durante el día como la noche. El llamado a abordar esta situación de manera efectiva y coordinada se ha vuelto más urgente que nunca.