Según un informe del Laboratorio de la Economía de la Educación (LEE) de la Universidad Javeriana, se presentan desafíos significativos en la educación rural en Colombia, incluido el acceso limitado a la educación y brechas educativas sustanciales. A pesar de que Colombia cuenta con 2,3 millones de estudiantes matriculados en áreas rurales, una proporción considerable de ellos no asiste a instituciones educativas, lo que plantea preocupaciones importantes sobre la equidad educativa y el desarrollo de habilidades en estas áreas.
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Uno de los hallazgos clave del informe es que en 2022, el 23,7% de los jóvenes en zonas rurales no asistió a ninguna institución educativa, ya sea de preescolar, colegio, escuela o universidad. Esto representa un problema crítico en términos de acceso a la educación y oportunidades para estos jóvenes. Además, se observa que la oferta de escuelas rurales tiende a estar altamente concentrada en la jornada diurna, lo que limita aún más el acceso para aquellos que no pueden asistir durante el día debido a responsabilidades familiares u otras razones.
El informe también revela deficiencias en infraestructura y acceso a recursos en las escuelas rurales. Por ejemplo, aproximadamente el 79,8% de las sedes educativas rurales carece de acceso a internet, lo que dificulta la participación en la educación en línea y limita el acceso a recursos educativos en línea. Además, el 59,7% de estas escuelas no tiene aulas de informática y el 18,1% no cuenta con servicio de energía eléctrica de manera constante.
La movilidad y el transporte son otro desafío importante en las zonas rurales, con el 61,5% de los estudiantes yendo a pie a sus lugares de estudio. Para aquellos en áreas rurales de los municipios Pdet (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial), el transporte en lanchas, planchones o canoas es fundamental para acceder a la educación.
El informe también señala las barreras financieras como una razón significativa por la cual la población en edad escolar no asiste a instituciones educativas, con un 26,2% en zonas urbanas y un 19% en zonas rurales citando falta de dinero o costos educativos prohibitivos. Otros factores, como el embarazo y las responsabilidades domésticas, también afectan la asistencia a la escuela en zonas rurales.
En términos de calidad educativa, los resultados de las pruebas Saber 11 revelan diferencias significativas entre estudiantes urbanos y rurales. En 2022, la diferencia en el puntaje global de las pruebas Saber 11 fue de 26,4 puntos en comparación con la zona urbana, lo que indica una brecha educativa significativa.
Si bien el informe señala que el 3,5% de las sedes rurales imparten educación bilingüe, incluyendo lenguas y dialectos indígenas, los investigadores advierten que estos datos pueden sobreestimar la penetración de la educación bilingüe en las zonas rurales. Además, se observa que el 14,7% de las sedes rurales cuentan con un sistema étnico-educativo, en comparación con solo el 3,96% en las áreas urbanas. Del mismo modo, el 9,6% de las sedes rurales tiene un sistema indígena propio, en contraste con el 1,2% de las sedes urbanas.
El informe destaca la necesidad de abordar estas barreras y desafíos en la educación rural para garantizar un acceso equitativo y una calidad educativa para todos los estudiantes en Colombia.