Luego de finalizar la jornada electoral en Colombia, un desencuentro público se produjo entre el presidente de la República, Gustavo Petro, y el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga. La fuente de la discordia fue una declaración de Zuluaga relacionada con la seguridad durante las elecciones, que Petro interpretó como un intento de «sembrar el miedo y la mentira».
El gobernador del Meta, en un video compartido en redes sociales, optó por no confrontar directamente al presidente y en su lugar emitió un mensaje conciliatorio. En su comunicado, Zuluaga destacó el mensaje que, según él, los colombianos enviaron en las elecciones, expresando masivamente su descontento con la política de agresión y exclusión del presidente.
Zuluaga hizo un llamado al presidente Petro para que desista de la confrontación y se enfoque en la gobernabilidad del país. «Las elecciones ya pasaron, la campaña quedó atrás. Ahora, dedíquese a gobernar», enfatizó.
Además, el gobernador regional criticó la involucración del presidente en asuntos internacionales, particularmente la situación entre Israel y Palestina. Le instó a concentrarse en la resolución de los problemas internos del país.
Este episodio demuestra las tensiones políticas que persisten en el ámbito nacional después de las elecciones, y los llamados a la unidad y la gobernabilidad siguen siendo una preocupación importante para los líderes del país.