El reconocido actor Vin Diesel, famoso por su rol como ‘Dominic Toretto’, ha sido acusado de agresión sexual por Asta Jonasson, quien trabajó brevemente como su asistente en la producción de la quinta entrega de la saga Rápidos y Furiosos en 2010. Según la demanda, Jonasson, recién graduada en cine en ese momento, tenía responsabilidades laborales que incluían acompañar a Diesel en eventos y prevenir situaciones incómodas.
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El incidente presuntamente ocurrió cuando se le pidió a Jonasson esperar en la habitación de hotel de Diesel en Atlanta, mientras él estaba con otras mujeres. Según el relato, Diesel habría forzado a Jonasson y la agredió sexualmente, lo que llevó a su despido al día siguiente, supuestamente instigado por Samantha Vincent, presidenta de One Race Productions y hermana de Diesel.
La demanda, presentada apoyándose en el movimiento #MeToo y la Ley de Sobrevivientes Adultos, detalla la devastación emocional sufrida por Jonasson, acusando discriminación de género, despido injustificado, represalias y supervisión negligente.
Esta acusación llega en un momento crucial, destacando el movimiento por la justicia y la igualdad de género en la industria del entretenimiento, mientras se profundiza en la lucha contra conductas inapropiadas y abuso de poder.
